Buenas noches vecino!, me dice la regordeta y tierna señora, me ve fumando apurado, temblando, un perro huesudo, mira la basura con ansias de que me vaya.

- frío hace!, respondo.

La viejita entra, cierra su puerta y el chilloncito gato le maúlla por ,supongo yo, ansias de jurel tipo salmón.
Lanzo mi cigarro al pasto húmedo, y a pesar de eso, no se apaga, ya hace días en la pieza ,y el humo,recordando que no me has llamado.

Por que mierda! lo prometiste ,Eve, me lo dijiste cuando me robaste ese mentiroso beso en la oscuridad de un antro ,¿será que este cuento comenzará algún día?¿o son duplicados ,copias de malas copias de otras historias. tus fotos esparramadas.

Tengo mil ensoñaciones y una de ellas ,es ser joven de nuevo y ser viejo ,anacrónicamente, al fin de mis días, acostarme a vuestro lado y decir :

-“ córrete pal lado mi vieja, te quiero al igual que esa noche, cuando brillaban tus ojitos verdes, bailabas para mi ,¿rememoras?”.

Y de tus labios secos, una declaración letal de amor eterno, de esas irresponsables palabrillas ligeras que te punzan a diario desde que te ví ir, que me tiene hasta ahora, sin tiempo y espacio, para asumir el puto frío que hace, elucubrando. Arropado en lamentos de invierno.

Ya vendrá un nuevo otoño, y la otra jodida primavera, y así comenzar otro ciclo de olvidos y añoranzas. Lo sé, siempre es igual.

Ø. riveradiaz